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26.4.10

un ángel.


hace veinticinco
y casi veintiséis,
un ángel llegó al mundo,
con machete y corazón de bueno.
un ángel llegó al mundo.
un mundo terriblemente feo.

el ángel por bueno,
llegó a un mundo terriblemente feo.
el bueno lustró su corazón y su machete
para darle guerra al feo.
quiso sacarle brillo al mundo,
con ganas de que fuera
tremendamente bello.
un ángel por bueno llegó al mundo,
y lo quiso tremendamente bello.

durante casi veintiséis guerreó el bueno,
contra el mundo feo y malo.
igual que en el infierno guerreó el bueno,
con su corazón y su machete
de frente y en la mano.

¡ay mundo malo!
el ángel se asustó de tu maldad.
¡ay mundo malo!
no mereciste al guerrero alado.

hace un mes ese ángel dejó el mundo,
se lanzó en su vuelo alado.
con su hermosa guerra melló al mundo,
le hizo un boquete como cráter de nevado.
un ángel tan chiquito,
y un mundo tan malvado.

otros mundos reclamaron
el concurso de ese bueno
y el ángel dejó al mundo,
y lo dejó un poco menos malo.

antes de partir,
el ángel pensó en los que quedaron,
volteó a ver al mundo y lo miró
un poco más bonito
con árboles morados,
pero en medio de una guerra
que recién había empezado.
volvió a lustrar su corazón y su machete
como cuando apenas había llegado,
y se los desvistió y dejó por todos lados
para que los que quedaron siguieran la tarea
y llenaran al mundo de campanas y árboles morados.

un ángel marcó al mundo
y dejó un pendiente encargado.
¡ay ángel, yo recojo tu encargo!
¡ay ángel, yo recojo ese machete y corazón alado!

18.4.10

crónicas del subsuelo. 8.

17 abril 2010. camino. más me arrastro. como gusano. sin despegar la suela. por el subsuelo. misma ruta. misma rutina. los sábados.
recuerdo. hasta el sábado 27 de marzo busco lo inesperado. lo indeterminado. en el subsuelo.
de lo indeterminado nace lo determinado. de la mancha nacen los rostros. los personajes. las anécdotas.
hoy recuerdo. hoy no busco lo indeterminado. sólo te busco a ti. torpe esperanza de que tu rostro aparezca. te busco y te busco. entre la multitud, la mancha. hoy no veo rostros. no veo personajes. no nace lo determinado. no estás. nunca más vas a estar entre la multitud. nunca más surgirá tu rostro de la mancha para dar sentido al mundo. ni al mío. ni al de nadie. descansa en paz.

crónicas del subsuelo. 7.

un lugar común:
la ciudad monstruo: un organismo vivo.
el cerébro: una lógica; la de la reproducción del valor.
las empresas e instituciones: los órganos.
el sistema de túneles y gusanos: el sistema circulatorio.
por la mañana marchamos; a las cinco, seis de la mañana, marchamos. glóbulos rojos, blancos y demás. la sangre alimentada. el gusano nos lleva y reparte a los órganos en donde dejamos lo que llevamos: energía, proteina, glucosa, oxígeno.
por la noche marchamos. el gusano nos lleva de vuelta a los pulmones a oxigenarnos.
el corazón: el hambre.

crónicas del subsuelo. 6.

en mi esquina del penúltimo vagón íbamos ocho, todos sentados con la mirada perdida. en el rincón que tiene dos lugares individuales de frente pegados a la pared, en el extremo opuesto a las escaleras de bombero.
los dos que ocupábamos esos asientos individuales no íbamos sentados de frente sino viendo hacia el vagón. noté que no venía nadie de pie y que los seis lugares más próximos a nosotros iban ocupados por cinco señores y una señora. todos íbamos con la mirada perdida. cuatro veían al suelo con los párpados inferiores recogidos. los otros veían hacia arriba, a los anuncios. sin leer creo. no pude decidir si a las seis de la tarde ellos iban de regreso a su casa después de la jornada laboral o, como yo, a penas se dirigían al segundo round.

crónicas del subsuelo. 5.

la muchacha que iba sentada frente a mí, vestía de blanco. tal vez doctora. morena de labios morenos y ojos oscurísimos sombreados con negro. sus pestañas largas. el fleco caía sobre la mitad del rostro cubriendo el ojo derecho. los párpados adornados con diamantina azul. le venía contando a su acompañante, que venía a mi lado, que ella generalmente dormía a esta hora. me la imaginé cubriendo turnos nocturnos en algún hospital de la ciudad de méxico. y se quedó dormida.